Una lactancia feliz es una lactancia sin dolor, entonces fisiológica. Por esto es importante que la madre tenga un apoyo emocional y profesional para resolver los problemas más comunes como el agarre del bebé, posturas, grietas.
La osteopatía como parte del equipo interdisciplinar puede ayudar en casos de mastitis, dolor articular, mala mecánica orofaríngea del bebé (osteopatía pediátrica) y sobrecarga psicoemocional con somatización física. Cómo actúa la osteopatía?
La enfermedad aparece cuando el cuerpo supera la capacidad de adaptación.
Se valorarán todos los sistemas del cuerpo: digestivo, respiratorio, genitourinario, nervioso,
historia del parto, cesárea y embarazo encuadrando el estado de salud de la madre y
localizando donde y cuando el cuerpo ha perdido la capacidad adaptativa postural (dolores
articulares), de defensas inmunitarias (mastitis), metabólica (stress), etc..
El movimiento de los líquidos es fundamental para que una inflamación pueda resolverse.
La respiración es la clave: el sistema linfático y vascular tienen que fluir, gracias al bombeo
de una buena mecánica respiratoria. Se utilizaran técnicas sobre arterias para aumentar la
flexibilidad, sobre ganglios para el drenaje linfático, sobre el tórax para mejorar la
respiración.
El sistema nervioso es lo que manda sobre todo: sensibilidad del pezón,
contractilidad de vasos, actividad linfática, respuesta inmunitaria y
transmisión del dolor.
Las técnicas osteopáticas libraran los nervios de irritación (costilla o vértebra bloqueada) y
el sistema nervioso central de la compresión (cráneo y sacro).
El sistema nervioso y el sistema emocional están muy relacionados.
El estrés emocional interfiere con el sistema hormonal de la lactancia.
Para ayudar en esto, es importante que exista un apoyo emotivo (pareja, familiar, doula, comadrona etc..) y que la mujer se vincule con sigo misma.
Vincularse significa encontrar el propio espacio, enraizarse con la propia pelvis, aceptar los cambios de rol, perder el miedo, trabajar sobre expectativas / realidad del parto y del post parto.
No hay técnicas específicas para esto, cada terapeuta encuentra el punto físico que hay que abrir, mover, desbloquear estableciendo un diálogo con el tejido ( que puede ser un sacro, un diafragma, una cicatriz, el cráneo etc..).
Para ayudar en esto, es importante que exista un apoyo emotivo (pareja, familiar, doula, comadrona etc..) y que la mujer se vincule con sigo misma.
Vincularse significa encontrar el propio espacio, enraizarse con la propia pelvis, aceptar los cambios de rol, perder el miedo, trabajar sobre expectativas / realidad del parto y del post parto.
No hay técnicas específicas para esto, cada terapeuta encuentra el punto físico que hay que abrir, mover, desbloquear estableciendo un diálogo con el tejido ( que puede ser un sacro, un diafragma, una cicatriz, el cráneo etc..).
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Eva Federici
Osteópata D.O.
Fisioterapeuta Colegiada 11319
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